Pesos y medidas
Longitud |
de 40 a 56 cm |
Peso |
de 300 a 600 g |
Envergadura de alas |
de 110 a 120 cm |
Estado de conservación
Descripción del animal
La gaviota cana (Larus canus) es una especie de ave perteneciente a la familia Laridae, ampliamente distribuida a través de Europa, Asia y partes de América del Norte. Se caracteriza por su adaptabilidad y versatilidad en hábitats y dietas, lo que la ha convertido en una de las gaviotas más comunes y reconocibles en muchas de las áreas que habita.
Esta ave de tamaño mediano posee una longitud que oscila entre 40 y 46 centímetros, con una envergadura alar que puede alcanzar los 110 a 125 centímetros. Su peso varía generalmente entre 300 y 500 gramos. La gaviota cana presenta un plumaje relativamente discreto pero elegante. Durante el periodo de reproducción, los adultos muestran una cabeza blanca con una distintiva máscara gris pálido que cubre la parte superior de la cabeza hasta el cuello. Sus partes superiores son de un gris claro, mientras que las inferiores son blancas. El pico es delgado y de color verde amarillento con una mancha negra cerca de la punta, y sus patas son de un tono verde amarillento pálido.
Fuera de la temporada de cría, su cabeza se adorna con manchas grises en la nuca y detrás de los ojos, perdiendo la homogeneidad del color que presenta en época de apareamiento. Los juveniles, por su parte, muestran un plumaje más moteado en tonos marrones y grises, que gradualmente va adquiriendo el aspecto adulto tras varias mudas a lo largo de tres o cuatro años.
La gaviota cana habita una variedad de ecosistemas que incluyen costas marinas, lagos, ríos y zonas urbanas. Su dieta es omnívora y oportunista, alimentándose de una amplia gama de recursos que incluyen peces, invertebrados, residuos humanos y, ocasionalmente, pequeños roedores o aves. Esta capacidad para explotar diversas fuentes de alimento le ha permitido prosperar en áreas altamente antropizadas.
La reproducción de la gaviota cana tiene lugar una vez al año, estableciendo colonias de cría en tierra firme o en islas, donde construyen nidos en el suelo con vegetación, plumas y otros materiales disponibles. La puesta típica consiste en dos a tres huevos, que son incubados por ambos padres durante aproximadamente tres semanas. Los polluelos son nidífugos, lo que significa que abandonan el nido poco después de nacer, aunque permanecen bajo el cuidado y protección de los padres hasta que son capaces de volar y alimentarse por sí mismos.
A pesar de enfrentar amenazas como la pérdida de hábitat, la contaminación y la competencia por alimentos en algunas áreas, la gaviota cana aún mantiene poblaciones robustas en gran parte de su rango de distribución. Su capacidad de adaptación ha sido clave en su supervivencia y éxito como especie, convirtiéndola en un miembro familiar y a menudo apreciado del paisaje natural y urbano en muchas partes del mundo.