Estado de conservación
Descripción del animal
La Gaviota Patiamarilla (Larus michahellis) es una especie de ave marina perteneciente a la familia Laridae. Se encuentra ampliamente distribuida por las costas de Europa, el norte de África y partes del Medio Oriente. Es un ave de tamaño mediano a grande, con una longitud corporal que oscila entre los 55 y 67 centímetros y una envergadura alar que puede alcanzar hasta los 155 centímetros.
El plumaje de los adultos es predominantemente blanco, con la espalda y las alas de un gris claro característico. Lo que más destaca de esta especie es el color amarillo de sus patas, el cual le da nombre. Además, posee un pico robusto de color amarillo con una mancha roja en la parte inferior del pico inferior, una adaptación que sirve para que sus crías piquen allí instintivamente para solicitar alimento. Sus ojos son de un color amarillo brillante, rodeados por un delgado anillo orbital de color rojo.
La Gaviota Patiamarilla es omnívora y oportunista, alimentándose de una amplia variedad de alimentos. Su dieta incluye peces, invertebrados marinos, desechos humanos, y ocasionalmente, pequeños mamíferos, aves y sus huevos. Esta capacidad para adaptarse a diferentes fuentes de alimento le ha permitido prosperar en diversos ambientes, incluyendo zonas urbanas y costeras.
Esta especie es conocida por su comportamiento gregario. Durante la temporada de cría, forman grandes colonias en acantilados costeros, islas o incluso en edificios en áreas urbanas. La Gaviota Patiamarilla es monógama y tiende a regresar al mismo lugar de nidificación año tras año. La hembra suele poner entre 2 y 3 huevos, los cuales son incubados por ambos padres durante aproximadamente tres semanas. Los polluelos son altriciales, naciendo con una capa de plumón y con los ojos abiertos, pero dependen completamente de sus padres para alimentarse durante las primeras semanas de vida.
Además de su presencia en el medio natural, la Gaviota Patiamarilla ha logrado adaptarse con éxito a ambientes urbanos, donde se alimenta de residuos y basura producidos por el ser humano. Esta adaptabilidad, sin embargo, ha llevado a conflictos con las poblaciones humanas debido a su comportamiento ruidoso y a veces agresivo, especialmente durante la temporada de cría cuando protegen sus nidos.
A pesar de su adaptabilidad y amplia distribución, la Gaviota Patiamarilla enfrenta amenazas derivadas de la actividad humana, como la contaminación, la pérdida de hábitats naturales y la sobreexplotación de los recursos pesqueros. No obstante, actualmente no se considera una especie en peligro de extinción. La conservación de sus hábitats naturales, junto con una gestión adecuada de los residuos urbanos, son esenciales para garantizar la supervivencia a largo plazo de esta interesante y adaptable especie de gaviota.