Descripción del animal

El Cormorán grande, conocido científicamente como Phalacrocorax carbo, es una especie de ave acuática perteneciente a la familia Phalacrocoracidae. Este impresionante pájaro se distribuye ampliamente por diversas partes del mundo, incluyendo Europa, Asia, África, y Australia, demostrando una notable adaptabilidad a diferentes entornos acuáticos tanto de agua dulce como salada.
Físicamente, el Cormorán grande es un ave de tamaño considerable, alcanzando una longitud de entre 70 a 102 cm y una envergadura de alas que puede variar de 121 a 160 cm. Su plumaje es mayormente de color negro con ciertos reflejos verdosos o azulados bajo la luz adecuada, lo que le proporciona una apariencia elegante y sobria. Durante la temporada de cría, los adultos desarrollan un área de piel desnuda de color blanco en la cara y una mancha de plumas blancas en los muslos, lo que añade un contraste distintivo a su apariencia general. Los jóvenes, por otro lado, presentan un plumaje más pálido y moteado que les ayuda a camuflarse mejor en su entorno.
Una de las características más notables del Cormorán grande es su habilidad para bucear en busca de alimento. Utiliza sus poderosas patas palmeadas para propulsarse bajo el agua, donde puede alcanzar profundidades considerables y nadar con notable agilidad para capturar peces, su principal fuente de alimento. Esta habilidad lo convierte en un pescador excepcional, capaz de atrapar una amplia variedad de presas acuáticas.
El Cormorán grande es un ave social que a menudo se observa en grupos, especialmente durante la temporada de cría, cuando forman colonias para anidar. Los nidos son construidos con ramas y se ubican en árboles, acantilados o incluso en el suelo en islas deshabitadas. La hembra generalmente pone de 3 a 4 huevos, que son incubados por ambos padres durante un período de aproximadamente un mes.
A pesar de su amplia distribución y capacidad para adaptarse a diferentes hábitats, el Cormorán grande enfrenta diversas amenazas, incluyendo la pérdida de hábitat, la contaminación de las aguas y la competencia por alimentos con la pesca comercial. Sin embargo, en general, la especie se considera de preocupación menor según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), gracias a su amplia distribución y población relativamente estable.
El Cormorán grande desempeña un papel importante en los ecosistemas acuáticos, actuando como un indicador de la salud de los hábitats de agua dulce y marina. Su presencia en un área puede señalar un ecosistema acuático saludable con una abundante población de peces. Este ave fascinante no solo es importante desde el punto de vista ecológico, sino que también es un espectáculo para los observadores de aves y la naturaleza, ofreciendo una visión única de la interacción entre las aves y su entorno acuático.