Pesos y medidas
Longitud |
de 18 a 19 cm |
Peso |
de 15 a 21 g |
Envergadura de alas |
de 25 a 27 cm |
Estado de conservación
Descripción del animal
La Lavandera cascadeña, conocida científicamente como Motacilla cinerea, es una especie de ave paseriforme perteneciente a la familia Motacillidae. Este encantador pájaro se distingue por su elegante apariencia y su comportamiento dinámico, siendo un espectáculo común en las proximidades de cursos de agua fresca a lo largo de Europa, Asia y partes del norte de África.
Con un tamaño que oscila entre los 18 y 20 centímetros de longitud y una envergadura de alrededor de 25 a 30 centímetros, la Lavandera cascadeña posee un plumaje que es tanto práctico como atractivo. Los machos, especialmente durante la temporada de cría, lucen un distintivo color gris azulado en la parte superior de su cuerpo, contrastando con su vientre blanco puro y los flancos claros. Su cabeza es adornada por una franja superciliar blanca que se destaca sobre un fondo oscuro, dando a su rostro una expresión penetrante. Las alas y la cola, aunque principalmente grises, presentan un patrón de barras negras que se hace evidente durante el vuelo. Las hembras y los jóvenes tienden a tener colores más apagados y menos contrastantes que los machos adultos, lo que les ofrece cierta camuflaje contra los depredadores.
Uno de los rasgos más característicos de la Lavandera cascadeña es su comportamiento activo y enérgico. A menudo se les puede observar en las orillas de ríos, arroyos y lagos, moviéndose con gracia en busca de alimento. Su dieta consiste principalmente en pequeños invertebrados acuáticos y terrestres, los cuales captura con destreza gracias a su agilidad y rapidez. Es notable su peculiar manera de alimentarse, la cual involucra correr y detenerse abruptamente, balancearse y realizar breves vuelos para atrapar insectos al vuelo.
La Lavandera cascadeña es también conocida por su melodioso canto, una serie de trinos y chirridos que varían en tono y duración. Durante la temporada de cría, los machos se vuelven particularmente vocales, utilizando su canto no solo para atraer a las hembras, sino también para delimitar y defender su territorio.
En cuanto a su reproducción, esta especie prefiere nidificar cerca del agua, eligiendo sitios como huecos en los árboles, cavidades en muros de piedra o incluso bajo puentes. El nido, construido principalmente por la hembra, es una estructura compacta hecha de musgo, hierbas y barro, y suele estar bien oculto de los posibles depredadores. La puesta típica consta de cuatro a seis huevos, que son incubados por ambos padres durante unas dos semanas. Los polluelos, al nacer, son alimentados por ambos progenitores hasta que están listos para emprender su primer vuelo aproximadamente dos semanas después de la eclosión.
A pesar de enfrentarse a amenazas como la pérdida de hábitat y la contaminación de los cuerpos de agua, la Lavandera cascadeña ha mostrado una notable capacidad de adaptación, lo que le ha permitido mantener poblaciones estables en muchas partes de su área de distribución. Sin embargo, la conservación de sus hábitats naturales sigue siendo crucial para asegurar la supervivencia a largo plazo de esta especie.